dimecres, 26 de març del 2008

Año 0. Día XXXVI. Movimientos oficiales.

Han pasado casi tres semanas desde la última mesa y por fin podemos ver nuevos movimientos "de peso" en la negociación. Mi opinión sobre lo no-acontencido durante este período está más que clara a lo largo de las anteriores entradas, por lo que sobra reiterarla.

Centrémonos en las novedades. Hoy la plataforma unitaria ha solicitado formalmente la convocatoria de nueva mesa de negociación con carácter de urgencia, recogiendo así el guante lanzado por el Sr. Conejo en sus últimas declaraciones a los medios de comunicación.

Si realmente existe ánimo de acabar con el conflicto laboral (y no mera palabrería de vendedor de pócimas milagrosas en ferias pueblerinas), el Ministerio tiene una oportunidad única para hacerlo de inmediato.

Por desgracia tras casi 2 meses de lucha, y más de un año de negociaciones infructuosas, es más que cuestionable que dicho ánimo exista. Afortunadamente en esta ocasión los pasos de los negociadores parecen más firmes y no solo han solicitado una reunión de urgencia sino que han convocado a la patronal para que, si no los cita antes, comparezca mañana a las 17 horas en la sede del Consejo General de la Abogacía.

Desconozco el motivo; pero parece evidente leyendo los últimos comunicados, que "la dirección" de la plataforma unitaria ha dado cabida (por fin) a una alternativa nueva en el estilo, las formas y los pasos para resolver el conflicto en Justicia.

A los hechos me remito:
  • por primera vez en tiempo, los sindicatos afrontan la situación con valor y solicitan la convocatoria de nueva mesa de negociación sin miedo a pueriles argumentos de parecer débiles o a llamamientos a una mal entendida dignidad (más bien orgullo). Y digo valor, porque lo fácil, lo cobarde, habría sido no dar la cara, no volver a pedir una nueva mesa y dejar que poco a poco el movimiento de los trabajadores se fuera desinflando para evitar ser salpicados por cualquier tipo de responsabilidad.
  • por primera vez en tiempo, el escrito instando la convocatoria de mesa de negocación ha sido redactada en unos términos no frentistas. Sin duda todos estamos hartos del carácter autoritario y despótico de la mascota de Duracell, pero no podemos caer en el error de contestar a estas agresiones con más violencia verbal. A aquellos que se sientan a negociar aspectos tan importantes (como una subida de un 18-20% de salario) lo mínimo que deberíamos exigirles es sangre fría y claridad de ideas, ya que en caliente solo se dicen bravuconadas.
  • por primera vez en mucho tiempo, se afronta la situación con varios escenarios alternativos. Para cada paso que dé el Ministerio, los sindicatos ya tienen preparadas respuestas alternativas conducentes (no a romper las negociaciones), si no a dejarlo sin argumentos para que tenga que sentarse y negociar. Que no nos convocas, te convocamos nosotros sin esperar más semanas. Que quieres un sitio neutral y no una sede sindical, pues lo hacemos en la sede de la abogacía donde acordaste expediantar a compañeros. Que dices que no hacemos nada para solucionar el conflicto, pues hacemos público que intentamos hasta hacer uso de un mediador sin que te dignaras en aparecer. Que dices que solo hablamos de dinero sin afrontar otros temas, pues directamente te ponemos como punto único de la reunión la resolución del conflicto en Justicia para resolver todas las discrepancias que existan.
Comprendo que tener que mantener una sola voz por sindicatos y asociaciones tan diferentes como las que integran la plataforma es ciertamente difícil. Por eso valoro también en gran medida el esfuerzo por mantener esta unidad cuando pueden existir más que razonables discrepancias en las tácticas de lucha que se siguen.

La primera lección de todo curso sobre negociación colectiva es que la mejor manera de acabarla es con la sensación de que todos ganan con el acuerdo. La peor, cuando todos pierden. Se están dando los pasos adecuados para tener la primera, ahora solo falta que ningún ego lo estropee.


¡Ánimo compañeros,
Venceremos convenciendo!





PD: Trabajar en el anonimato de quien no alza la voz, en la frialdad de una calle a la sombra en un día soleado, nunca tendrá la recompensa que se merece. Tan solo el sin sabor de sonreír por lograr aquello por lo que has luchado pero entristecido por no haber logrado un merecido reconocimiento por ello. Gràcies per intentar-lo.

Reir o llorar