dimecres, 12 de març del 2008

Año 0. Día XVIII. Papá cuentame otra vez

Nunca se realmente lo que voy a escribir cuando me acerco a este blog. Como mucho tengo en mente un "hipotético escenario" basado en una idea peregrina que al final descarto por sabe Dios que inconfesables motivos, para acabar hablando de algo totalmente distinto. Es lo que tienen las "hipótesis", que nunca han existido ni existirán mientras no luche alguien por hacerlas realidad.

Quería centrarme hoy en homenajear a aquellos compañeros y compañeras que han aguantado más de un mes de huelga y ahora tienen que aguantar el chaparron de que algunos cobardes (tal es la definición del que solo se atreve a actuar/hablar amparado en la masa) les llamen esquirolres por haber vuelto a sus puestos de trabajo.

Y digo quería, porque en medio de los pensamientos se me ha cruzado una canción de Ismael Serrano cuya letra decía:


Papá cuéntame otra vez ese cuento tan bonito
de gendarmes y fascistas, y estudiantes con flequillo,
y dulce guerrilla urbana en pantalones de campana,
canciones de los Rolling, y niñas en minifalda.

Papá cuéntame otra vez todo lo que os divertisteis
estropeando la vejez a oxidados dictadores,
y cómo cantaste Al Vent y ocupasteis la Sorbona
en aquel mayo francés en los días de vino y rosas.

Papá cuéntame otra vez esa historia tan bonita
de aquel guerrillero loco que mataron en Bolivia,
y cuyo fusil ya nadie se atrevió a tomar de nuevo,
y como desde aquel día todo parece más feo.

Papá cuéntame otra vez que
tras tanta barricada
y tras tanto puño en alto y tanta sangre derramada,
al final de la partida no pudisteis hacer nada
,
y bajo los adoquines no había arena de playa.

Fue muy dura la derrota: todo lo que se soñaba
se pudrió en los rincones, se cubrió de telarañas,
y ya nadie canta Al Vent, ya no hay locos ya no hay parias,
pero tiene que llover aún sigue sucia la plaza
.

Queda lejos aquel mayo, queda lejos Saint Denis,
que lejos queda Jean Paul Sartre, muy lejos aquel París,
sin embargo a veces pienso que al final todo dio igual:
las ostias siguen cayendo sobre quien habla de más
.

Y siguen los mismos muertos podridos de crueldad.
Ahora mueren en Irack los que morían en Vietnam.
Ahora mueren en Irack los que morían en Vietnam.
Ahora mueren en Irak los que morían en Vietnam...

... Hipótesis o realidad. Ilusiones o Acciones. Alaridos quejumbros o voces contundentes.
¡Que coño!, si las ostias siguen cayendo sobre quien habla de más por lo menos que sea por una causa justa y cual puede serlo más que el que te partan la cara por ponerla entre un compañero y quien intenta coaccionarlo:
RINDO HOMENAJE, APLAUSO Y APOYO a todos aquellos que han luchado con valor, valentía y orgullo durante todos estos días de movilizaciones. PRESENTO MIS RESPETOS a aquellos que han dado todo lo que estaba en su interior, y un poco más, por unas justas reivindicaciones.
Moleste a quien moleste, no podemos permitir que se coaccione o se minusvaloren los días de lucha de cientos de compañeros.
Es intolerable que se cuestione su actitud o se les acuse de reventar la huelga. Más bien al contrario, muchos que a gritos los increpan deberían aprender de ellos, de como con su silencio siguen apoyando esta lucha ya que si hablasen...
...Si hablasen y contasen lo que realmente sienten u opinan, si entrasen en el debate con lo datos que conocen, si pidiesen la palabra en las asambleas para recordar las incoherencias y los cambios de actitud que algunos han tenido en estas semanas.
... si hablasen lo primero que tendrían que decir a los que gratuitamente los acusan es "yo dejo la huelga porque tu no dimites de un cargo que desmereces".
Vuestro silencio aguantando insultos antes que desmovilizar a uno solo de los huelguistas es un ejemplo de Grandeza. Y recordad, que nunca estareis solos/as, levantad la vista y entre la generalidad de los trabajadores, os vereis en la unión.
Ánimo compañeros/as mantener bien altas las cabezas,
la mirada al frente y el orgullo intacto, la lucha continúa y juntos venceremos.
Y siempre CONVENCIENDO, no imponiendo.

Reir o llorar