Durante los últimos días una frase golpea constantemente mi cabeza hasta hacer que se incline: "para que el mal triunfe solo es necesario que los buenos no hagan nada".
Lo dijo el pensador conservador Burke y por desgracia está cargada de verdad. La inoperancia e impotencia fomenta, reafirma y ampara la mediocridad de los débiles de carácter y mediocres de mente que se regocijan en perpetuarse en las poltronas.
Pero no quiero que esta entrada nos deje con ánimos alicaidos sino más bien al contrario, nos reafirme en la necesidad de no dejar las trincheras de las miles de luchas que cada día emprendemos. Empezada con una frase célebre, cierro con otra (esta un poco más friki) de Gandalf: "Pero no nos atañe a nosotros dominar todas las mareas del mundo, sino hacer lo que está en nuestras manos por el bien de los días que nos ha tocado vivir, extirpando el mal en los campos que conocemos, y dejando a los que vendrán después una tierra limpia para la labranza. Pero que tengan sol o lluvia, no depende de nosotros."
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada