Vaya por delante que no considero ni de lejos a la F1 como un deporte, que considero que las carreras salvo accidente o lluvia son un auténtico tostón y que sin un coche ganador ningún piloto puede subir al podio.
Dicho lo cual, Robert Kubica por fin se hace con su primera victoria en la fórmula 1. Un joven piloto llamado a tener un coche ganador en sus manos: no comete errores, no se le adelanta, no se pone nervioso y sabe cuando y donde arriesgar (no como otros).

Cuarto Roland Garros consecutivo, podría ser uno más, pero ni mucho menos: ha barrido de la pista al que posiblemente será uno de los 3 mejores tenistas de la historia (sino el mejor). Y ojo, vencer a un mito de manera tan aplastante es una locura al alcance de pocos, pero hacerlo además cuando Federer persigue como loco una victoria en París es algo al alcance de casi ninguno.
Durante estos días se rememoran las finalísimas de la NBA entre Lakers y Celtics, pero sin duda, debemos apreciar y valorar también estos enfrentamientos Nadal-Federer como parte de la historia del deporte.
Enhorabuena campeones!
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada